La agonía por rescatar a Julen y la desesperación de los padres en Totalán

Compartir en:
fjrigjwwe9r1_articulos:cuerpo
Los equipos de rescate para encontrar al niño Julen, que cayó a un pozo en la localidad malagueña de Totalán, comenzaron a abrir un túnel lateral de unos 80 metros, aprovechando la pendiente de la montaña, para intentar llegar a la zona donde se supone que se encuentra el pequeño, según comentó la subdelegada del Gobierno en Málaga, María Gámez.

Los trabajos comenzaron a las siete de este martes por la mañana, después de que los equipos de rescate llevaran horas succionando la tierra bajo la que podría encontrarse el niño de dos años, y dado que las máquinas empleadas han encontrado una masa compacta que no se puede sacar, a unos 73 metros de profundidad.

El hallazgo de chuches y de una bolsa sirvieron para confirmar el relato de un familiar de Julen, que lo vio caer por el pozo por el que se busca desde las dos de la tarde del pasado domingo. Prácticamente sin descanso se ha trabajado cada vez con más material y equipamiento en unas tareas que a las dos de la tarde de este martes habrán superado las 48 horas de duración.

Este lunes el dispositivo de emergencia instalado en la misma finca familiar donde desapareció el pequeño de 2 años incluso estudiaba fórmulas inéditas, como la entrada de bomberos desde un nuevo pozo que ya se perforaba, al objeto de agilizar al máximo la localización.

La prioridad es acceder en primer lugar hasta el emplazamiento en el que se encuentre el menor, un punto situado entre los 75 y 107 metros de profundidad en el interior del pozo de la finca familiar enclavada en el Dolmen del Cerro de la Corona. El portavoz de la Guardia Civil en Málaga, Bernardo Moltó, apuntó a que se trabajaba inicialmente con tres opciones.

"Seguir extrayendo la tierra pero un sistema más especializado, para lo que se utilizarán vehículos; hacer un segundo pozo paralelo, para lo que antes hay que entubar el primero, para protegerlo; y probar a hacer una excavación a cielo abierto desde el lateral de la montaña", son las que se proponen.

No es la única "tragedia" que golpea a José y Victoria, los padres del niño que cayó en el pozo en Málaga. Cuando Julen tenía muy pocos meses, su hermano mayor, Oliver, falleció de muerte súbita.  

El pasado domingo Julen disfrutaba con sus padres y otros familiares y amigos de un día de campo en el Cerro de la Corona, paraje del municipio de Totalán, muy próximo a la capital.

El agujero por el que cayó apenas tiene 25 centímetros de diámetro y se extiende casi 110 metros en vertical a través de la montaña. El acceso por el hueco es imposible, salvo para un pequeño cuerpo como el del niño. 

 
Compartir en: