Biden emerge como el rival de Sanders ante el supermartes decisivo
Fuertes incógnitas en el Partido Demócrata en Estados Unidos y gran atención en las redes.
Antes del decisivo supermartes -el voto en 14 estados, un territorio y los demócratas en el extranjero con reparto de más de 1.300 delegados, el 34% del total- emergió Joe Biden. Se consolida como el principal rival de Bernie Sanders.
Primer volantazo en el Partido Demócrata. Crece la presión sobre Pete Buttigieg y Amy Klobuchar para retirarse y unificar el voto moderado. Una presión que llega a las orillas de la candidatura de Michael Bloomberg, el exalcalde de Nueva York. ¿MB acertó con su estrategia de esperar hasta el supermartes para poner su nombre en las papeletas? Ya ha invertido 500 millones de publicidad en esta parte inicial de la campaña de la elección presidencial en Estados Unidos.
La victoria de Joe Biden llegó en el momento crítico. Un resbalón en Caroliona del Sur hubiera apagado su estrella. Sucedió justo lo contrario. Emerge como candidato serio y moderado ante el supermartes frente al fenómeno Bernie Sanders y la incógnita del experimento MB.
Con el 100% de las papeletas contadas, Biden obtuvo el 48,4% de los votos frente al 19,9% de Sanders, en segunda posición. El exvicepresidente de Barack Obama insiste en el tercer asalto para el nombramiento del Partido Demócrata a la Casa Blanca, en un periodo total de 32 años. Nunca antes ganó en un solo Estado. Ahora lo hizo, y de forma brillante,en las primarias de Carolina del Sur.
Después de decepcionantes resultados en Iowa, New Hampshire y Nevada, Biden apostó por conquistar un Estado que ha sido históricamente su bastión político. Precisamente el escenario donde la minoria negra representa un 56% del electorado demócrata. El voto negro es fundamental dentro del electorado demócrata y el resultado de Carolina del Sur puso a prueba la capacidad para su movilización. En la votación del supermartes, seis de los Estados se hallan en el sur.
Nos acercamos al momento de uno de los grandes debates de la primera parte de la camapaña. El de definir quién es el candidato que puede construir una coalición amplia y eficaz (incluyendo a los afroamericanos) capaz de derrotar a Donald Trump.
Antes del decisivo supermartes -el voto en 14 estados, un territorio y los demócratas en el extranjero con reparto de más de 1.300 delegados, el 34% del total- emergió Joe Biden. Se consolida como el principal rival de Bernie Sanders.
Primer volantazo en el Partido Demócrata. Crece la presión sobre Pete Buttigieg y Amy Klobuchar para retirarse y unificar el voto moderado. Una presión que llega a las orillas de la candidatura de Michael Bloomberg, el exalcalde de Nueva York. ¿MB acertó con su estrategia de esperar hasta el supermartes para poner su nombre en las papeletas? Ya ha invertido 500 millones de publicidad en esta parte inicial de la campaña de la elección presidencial en Estados Unidos.
La victoria de Joe Biden llegó en el momento crítico. Un resbalón en Caroliona del Sur hubiera apagado su estrella. Sucedió justo lo contrario. Emerge como candidato serio y moderado ante el supermartes frente al fenómeno Bernie Sanders y la incógnita del experimento MB.
Con el 100% de las papeletas contadas, Biden obtuvo el 48,4% de los votos frente al 19,9% de Sanders, en segunda posición. El exvicepresidente de Barack Obama insiste en el tercer asalto para el nombramiento del Partido Demócrata a la Casa Blanca, en un periodo total de 32 años. Nunca antes ganó en un solo Estado. Ahora lo hizo, y de forma brillante,en las primarias de Carolina del Sur.
Después de decepcionantes resultados en Iowa, New Hampshire y Nevada, Biden apostó por conquistar un Estado que ha sido históricamente su bastión político. Precisamente el escenario donde la minoria negra representa un 56% del electorado demócrata. El voto negro es fundamental dentro del electorado demócrata y el resultado de Carolina del Sur puso a prueba la capacidad para su movilización. En la votación del supermartes, seis de los Estados se hallan en el sur.
Nos acercamos al momento de uno de los grandes debates de la primera parte de la camapaña. El de definir quién es el candidato que puede construir una coalición amplia y eficaz (incluyendo a los afroamericanos) capaz de derrotar a Donald Trump.
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