Despliegue de la UME en Ávila, Toledo, Madrid y Tarragona en graves incendios

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El Ministerio de Defensa confirmó la movilización. Ante una situación de enorme gravedad en España, la Unidad Militar de Emergencias (UME) desplegó 725 militares y 191 vehículos. A esta operación se han sumado aviones anfibios del Ejército del Aire y aparatos del Batallón de Helicópteros de Emergencias del Ejército de Tierra



Todo este dispositivo se mantiene desplegado para hacer frente a los incendios forestales que se han producido en Gavilanes (Ávila), Toledo (alrededores de la ciudad) y Almorox (entre Toledo y Madrid). Efectivos de la Unidad Militar de Emergencias siguen trabajando en el fuego ya existente en Tarragona desde el pasado miércoles.

Hasta el momento se han quemado unas 6.000 hectáreas. El 90% del perímetro está estable, pero todavía hay una parte del flanco norte derecho que todavía preocupa a los bomberos. Allí se han destinado unidades de la UME para colaborar con los bomberos de la Generalitat en la extinción del incendio de Torre del Español.

La UME ha desplegado sus cinco batallones de Intervención en Emergencias para atender todas las solicitudes de las respectivas comunidades autónomas de Cataluña, Castilla la Mancha, Madrid y Castilla y León. Se ha aplicado el protocolo de intervención de la UME.

El fuego en Almorox (Toledo), afectó a localidades de la Comunidad de Madid como Cadalso de los Vidrios. La urbanización Entrepinos tuvo que ser evacuada. En su defensa de las llamas han trabajado las unidades militares. Se desalojaron viviendas a la entrada del municipio de Cenicientos. 

El presidente en funciones de la Comunidad de Madrid, Pedro Rollán, explicó en la plaza de Cenicientos, donde quedó instalado el mando central operativo, que las condiciones son muy complicadas, sobre todo por las altas temperaturas, el viento cambiante y baja humedad.

En Ávila, la UME ha desplegado 172 militares con 52 vehículos para colaborar en la extinción del incendio de Gavilanes. El dispositivo militar, perteneciente a los de los batallones de Madrid (BIEM I) y León (BIEM V), se centró en el ataque directo a los fuehos y la defensa de poblaciones como Pedro Bernardo. En el gran incendio de Gavilanes, la Junta de Castilla y León señaló que detrás de él "hay una causa humana".
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