Duro ataque de María Jesús Montero contra Pablo Casado
La posición del Partido Popular (88) diputados aún no está decidida antes de conocerse el techo de gasto y se presente el borrador de los Presupuestos Generales del Estado (PGE).
Atención a que todo está muy abierto en el Partido Popular. Hay cada vez voces más importantes en el partido a favor de un clima de pacto profundo entre PP y PSOE, el clima de acuerdo que trata de evitar y torpedear Pablo Iglesias.
Paradójicamente Cuca Gamarra e Inés Arrimadas rechazan un pacto con un Gobierno social-comunista. Pero ambas creen en la importancia de influir, moderar y apoyar unos Presupuestos que deben ser, si se tejen con finura, un éxito de Pedro Sánchez.
No se sabe ni conoce el clima y talante de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias en el cara a cara más largo e intenso que han mantenido durante dos horas. La impresión de analistas es que los puentes entre PSOE y PP están en pie. Pero la percepción a la vez es la de un Pablo Casado más debilitado, tocado y fatigado.
Tras el encuentro de los dos líderes sorprendió además la agresividad de la portavoz, nerviosa cada vez más por estar en la lista de ceses en las quinielas de una crisis de gobierno que avanza.
La ministra portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, apareció realmente crispada con Pablo Casado calificando su actuación de "decepción, obstrucción, cerrazón, confrontación, falsedad, manipulación y frentismo". Incluso advirtió que "Casado no piensa cumplir con la Constitución".
Curiosamente, Montero pudo aparecer más furiosa y enfadada porque Pablo Iglesias se ha puesto al frente de todas las acciones para plantar los principios del borrador del los PGE. Pero ese es otro asunto y otras coordenadas.
Atención a que todo está muy abierto en el Partido Popular. Hay cada vez voces más importantes en el partido a favor de un clima de pacto profundo entre PP y PSOE, el clima de acuerdo que trata de evitar y torpedear Pablo Iglesias.
Paradójicamente Cuca Gamarra e Inés Arrimadas rechazan un pacto con un Gobierno social-comunista. Pero ambas creen en la importancia de influir, moderar y apoyar unos Presupuestos que deben ser, si se tejen con finura, un éxito de Pedro Sánchez.
No se sabe ni conoce el clima y talante de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias en el cara a cara más largo e intenso que han mantenido durante dos horas. La impresión de analistas es que los puentes entre PSOE y PP están en pie. Pero la percepción a la vez es la de un Pablo Casado más debilitado, tocado y fatigado.
Tras el encuentro de los dos líderes sorprendió además la agresividad de la portavoz, nerviosa cada vez más por estar en la lista de ceses en las quinielas de una crisis de gobierno que avanza.
La ministra portavoz del Gobierno y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, apareció realmente crispada con Pablo Casado calificando su actuación de "decepción, obstrucción, cerrazón, confrontación, falsedad, manipulación y frentismo". Incluso advirtió que "Casado no piensa cumplir con la Constitución".
Curiosamente, Montero pudo aparecer más furiosa y enfadada porque Pablo Iglesias se ha puesto al frente de todas las acciones para plantar los principios del borrador del los PGE. Pero ese es otro asunto y otras coordenadas.
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