Elogio de Rajoy a la lección de dignidad de la oposición en Cataluña

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La justicia acorrala a todos los responsables del referéndum:

1. La Fiscalía decide acusar al Govern ( una de las instituciones estatutarias que conforman la Generalitat de Cataluña) de desobediencia, prevaricación y malversación.

2. El Tribunal Constitucional suspende la ley de la consulta y su convocatoria el 1 de octubre.

3. Mariano Rajoy, en un mensaje a la nación desde el Palacio de La Moncloa, señaló que no va apermitir "que se liquide nuestro sistema de convivencia".

La batalla de la consulta ilegal se traslada ahora a los Ayuntamientos. El Gobierno ha recalcado a los alcaldes que no pueden ceder locales.

Indudablemente es un momento político muy difícil. Sin embargo, hay que subrayar que frente al desafío del bloque independentista (al aprobar la ley y el decreto de convocatoria de un referéndum secesionista ilegal, antiestatutario y anticonstitucional), hubo una reacción rápida y efectiva, marcada por la sensatez.

Fue una respuesta de firmeza y de serenidad en defensa de la legalidad democrática y de los derechos cívicos de los ciudadanos. Actuó el Gobierno, los grandes partidos y el sistema judicial.

Pero la mejor reacción, como valoró de manera acertada Mariano Rajoy, estuvo en el Parlamento de Cataluña por parte de los grupos de la oposición. Las fechas del miércoles 6 como el jueves 7 quedarán marcadas por la valentía de los diputados de las minorías y su defensa con pasión de los derechos de los ciudadanos. Fue una lección de coraje democrático frente a los secesionistas y la actuación sesgada de la presidenta del Parlamento de Cataluña, Carme Forcadell.
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