La manifestación contra el 25 % en castellano
La movilización se convocó por medio de la plataforma Somescola para manifestar contra la decisión del Tribunal Supremo que busca fijar un mínimo del 25 % de enseñanza en castellano en el sistema catalán.
Por esa razón, distintas organizaciones se pusieron de acuerdo para frenar al Tribunal Supremo.
La manifestación
La movilización comenzó en torno a las 11 horas. El punto de encuentro fue la plaza Tetuán hasta alcanzar el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña a las 12 horas. Contó con presencia del presidente del Generalitat, Pere Aragonès y la presidenta del Parlament, Laura Borràs.
La sociedad catalana salió a las calles para defender el modelo de su escuela que se basa en la lengua catalana como la principal para impartir conocimiento.
El avance del Tribunal Supremo fue interpretado como una ofensiva del nacionalismo español. Según quienes se movilizaron, se busca cambiar el futuro de los alumnos catalanes y destruir la cohesión social construida con el paso de los años.
Laura Borràs afirmó que quienes apoyan el nuevo modelo lingüístico buscan que haya menos catalán en la sociedad. El modelo que se busca imponer es una ofensiva para dividir y atacar la lengua.
La respuesta, según la Generalitat y el Parlament, es que la sociedad catalana debe mostrar cohesión y unidad. Defender el modelo lingüístico actual significa defender el contexto social, académico, pedagógico y político construido hace más de 10 años.
El Govern también se encuentra totalmente comprometido con la causa. Han participado en la cumbre y buscan avanzar en el uso social de la lengua catalana para crear la unidad como un solo país. De esa base se deriva el lineamiento que tuvo lugar en la manifestación que ocurrió en las calles céntricas de Barcelona.
Imperaron los cantos y gritos para “pedir respeto a los consensos” y a la “escuela catalana”. Por otro lado, el presidente del Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, ha participado en la movilización. Desde su lugar exige que se le haga frente a esta intrusión del poder judicial avalada por las demás esferas del poder político.
El catalanismo social se encontró en las calles para defender un modelo exitoso y garante de la cohesión social tan importante para el buen funcionamiento del país.
CUP defiende la inmersión lingüística
La CUP o Candidatura de Unidad Popular ha sido parte de esta manifestación declarándose en contra de las medidas que buscan implementarse por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña. La movilización es, sin duda, una confrontación directa a las fuerzas que buscan desplazar el catalán de las instituciones educativas.
La inmersión lingüística es una causa por la que se luchó durante años. Dolors Sabater, perteneciente al Parlament, defendió el movimiento que busca preservar una conquista civil sin igual en la historia de la lengua catalana. La movilización social parece ser el único medio por el cual el pueblo podrá manifestarse e impedir el avance de una medida que puede traer grandes problemas al pueblo.
Por esa razón, distintas organizaciones se pusieron de acuerdo para frenar al Tribunal Supremo.
La manifestación
La movilización comenzó en torno a las 11 horas. El punto de encuentro fue la plaza Tetuán hasta alcanzar el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña a las 12 horas. Contó con presencia del presidente del Generalitat, Pere Aragonès y la presidenta del Parlament, Laura Borràs.
La sociedad catalana salió a las calles para defender el modelo de su escuela que se basa en la lengua catalana como la principal para impartir conocimiento.
El avance del Tribunal Supremo fue interpretado como una ofensiva del nacionalismo español. Según quienes se movilizaron, se busca cambiar el futuro de los alumnos catalanes y destruir la cohesión social construida con el paso de los años.
Laura Borràs afirmó que quienes apoyan el nuevo modelo lingüístico buscan que haya menos catalán en la sociedad. El modelo que se busca imponer es una ofensiva para dividir y atacar la lengua.
La respuesta, según la Generalitat y el Parlament, es que la sociedad catalana debe mostrar cohesión y unidad. Defender el modelo lingüístico actual significa defender el contexto social, académico, pedagógico y político construido hace más de 10 años.
El Govern también se encuentra totalmente comprometido con la causa. Han participado en la cumbre y buscan avanzar en el uso social de la lengua catalana para crear la unidad como un solo país. De esa base se deriva el lineamiento que tuvo lugar en la manifestación que ocurrió en las calles céntricas de Barcelona.
Imperaron los cantos y gritos para “pedir respeto a los consensos” y a la “escuela catalana”. Por otro lado, el presidente del Òmnium Cultural, Jordi Cuixart, ha participado en la movilización. Desde su lugar exige que se le haga frente a esta intrusión del poder judicial avalada por las demás esferas del poder político.
El catalanismo social se encontró en las calles para defender un modelo exitoso y garante de la cohesión social tan importante para el buen funcionamiento del país.
CUP defiende la inmersión lingüística
La CUP o Candidatura de Unidad Popular ha sido parte de esta manifestación declarándose en contra de las medidas que buscan implementarse por el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña. La movilización es, sin duda, una confrontación directa a las fuerzas que buscan desplazar el catalán de las instituciones educativas.
La inmersión lingüística es una causa por la que se luchó durante años. Dolors Sabater, perteneciente al Parlament, defendió el movimiento que busca preservar una conquista civil sin igual en la historia de la lengua catalana. La movilización social parece ser el único medio por el cual el pueblo podrá manifestarse e impedir el avance de una medida que puede traer grandes problemas al pueblo.
Compartir en: