Vox un invento de Aznar para atacar a Rajoy, Sánchez contra Casado
El presidente de Gobierno en funciones admitió su error en Al rojo vivo y señaló que "La Fiscalía tiene toda mi confianza y toda la independencia del Gobierno".
A tres días de la celebración de las elecciones generales del próximo domingo, Pedro Sánchez, acudió al programa Al rojo vivo que dirige y presenta Antonio García Ferreras en La Sexta. Hay que señalar que no lo hizo en directo. La entrevista fue grabada y emitida en diferido.
En esta cadena se celebra este mismo jueves, a las 22 horas, el Debate 7N: La última oportunidad que cuenta con María Jesús Montero (PSOE), Ana Pastor Julián (PP), Inés Arrimadas (Ciudadanos), Irene Montero (Unidas Podemos) y Rocío Monasterio (Vox).
En sus declaraciones a Antonio García Ferreras, Pedro Sánchez achacó al cansancio sus declaraciones sobre la Fiscalía: "Son muchas entrevistas, muchas horas frente a un micrófono y una pantalla, y algunas veces no se es preciso", señaló reconociendo que se equivocó y que "hay que ser humilde".
Aclaró que la Fiscalía tiene toda la independencia que tiene que tener y él únicamente muestra la disposición del Gobierno para ayudar en el cumplimiento de la ley para que los líderes independentistas huidos de la Justicia sean extraditados para rendir cuentas.
Respecto a su contundente promesa de traer a España a Carles Puigdemont, explicó que son expresiones usadas en los debates y que él quiso reiterar el compromiso del Gobierno para que la Justicia española y sus sentencias se cumplan.
También ha opinado sobre la euroorden de extradición de Clara Ponsatí apuntando que no fue la Justicia británica la que dijo que era "desproporcionada", sino una institución vinculada al Ministerio del Interior. "En todo caso, hemos recibido disculpas y lo que piden es más información sobre la sentencia para conocer más a fondo los puntos de la reactivación de la euroorden".
Sobre el levantamiento del secreto de sumario en una de las piezas sobre los CDR, Sánchez afirma que lo publicado es "grave", pero insta a ser "cuidadosos" porque se demuestra que "tanto la Justicia como la Policía están estrechando el cerco a los radicales que vinculan el independentismo a la violencia".
Además, instó a Quim Torra a que comparezca en el Parlamento de Cataluña -tal y como ha pedido Miquel Iceta- para aclarar qué verosimilitud tiene lo publicado en el sumario. Asimismo, ha vuelto a reiterar que Quim Torra tiene que condenar la violencia porque, hasta que no lo haga, "es muy difícil que se pueda abrir una nueva etapa de diálogo".
En estas declaraciones, también se mostró muy crítico con Partido Popular y Ciudadanos a quienes ha responsabilizado del auge de Vox por sus pactos. “Los pactos con la ultraderecha han beneficiado a la ultraderecha”, señaló antes de sostener que este partido “no es más que un invento de Aznar para desestabilizar a Rajoy”.
Para reforzar su afirmación, recordó cuando el expresidente José María Aznar alababa a Santiago Abascal como “ese chico con grandes cualidades”. Eso es consecuencia de que “ahora se hayan impuesto ideológicamente a la derecha”, hasta el punto de que “se los están comiendo electoralmente” y “hay riesgo de que sean tercera fuerza política”, advirtió.
A tres días de la celebración de las elecciones generales del próximo domingo, Pedro Sánchez, acudió al programa Al rojo vivo que dirige y presenta Antonio García Ferreras en La Sexta. Hay que señalar que no lo hizo en directo. La entrevista fue grabada y emitida en diferido.
En esta cadena se celebra este mismo jueves, a las 22 horas, el Debate 7N: La última oportunidad que cuenta con María Jesús Montero (PSOE), Ana Pastor Julián (PP), Inés Arrimadas (Ciudadanos), Irene Montero (Unidas Podemos) y Rocío Monasterio (Vox).
En sus declaraciones a Antonio García Ferreras, Pedro Sánchez achacó al cansancio sus declaraciones sobre la Fiscalía: "Son muchas entrevistas, muchas horas frente a un micrófono y una pantalla, y algunas veces no se es preciso", señaló reconociendo que se equivocó y que "hay que ser humilde".
Aclaró que la Fiscalía tiene toda la independencia que tiene que tener y él únicamente muestra la disposición del Gobierno para ayudar en el cumplimiento de la ley para que los líderes independentistas huidos de la Justicia sean extraditados para rendir cuentas.
Respecto a su contundente promesa de traer a España a Carles Puigdemont, explicó que son expresiones usadas en los debates y que él quiso reiterar el compromiso del Gobierno para que la Justicia española y sus sentencias se cumplan.
También ha opinado sobre la euroorden de extradición de Clara Ponsatí apuntando que no fue la Justicia británica la que dijo que era "desproporcionada", sino una institución vinculada al Ministerio del Interior. "En todo caso, hemos recibido disculpas y lo que piden es más información sobre la sentencia para conocer más a fondo los puntos de la reactivación de la euroorden".
Sobre el levantamiento del secreto de sumario en una de las piezas sobre los CDR, Sánchez afirma que lo publicado es "grave", pero insta a ser "cuidadosos" porque se demuestra que "tanto la Justicia como la Policía están estrechando el cerco a los radicales que vinculan el independentismo a la violencia".
Además, instó a Quim Torra a que comparezca en el Parlamento de Cataluña -tal y como ha pedido Miquel Iceta- para aclarar qué verosimilitud tiene lo publicado en el sumario. Asimismo, ha vuelto a reiterar que Quim Torra tiene que condenar la violencia porque, hasta que no lo haga, "es muy difícil que se pueda abrir una nueva etapa de diálogo".
En estas declaraciones, también se mostró muy crítico con Partido Popular y Ciudadanos a quienes ha responsabilizado del auge de Vox por sus pactos. “Los pactos con la ultraderecha han beneficiado a la ultraderecha”, señaló antes de sostener que este partido “no es más que un invento de Aznar para desestabilizar a Rajoy”.
Para reforzar su afirmación, recordó cuando el expresidente José María Aznar alababa a Santiago Abascal como “ese chico con grandes cualidades”. Eso es consecuencia de que “ahora se hayan impuesto ideológicamente a la derecha”, hasta el punto de que “se los están comiendo electoralmente” y “hay riesgo de que sean tercera fuerza política”, advirtió.
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