Vox justificó su moción ante la inacción del Partido Popular
Vox justificó su moción de censura en el Congreso de los Diputados como un “deber nacional” ante la “inacción” del Partido Popular. El diputado Ignacio Garriga intervino en primer lugar y acusó al presidente del Gobierno. "Señor Sánchez, es usted el símbolo de la mentira y el fraude", sentenció. En el marco de esta moción, Vox atribuye a Pedro Sánchez querer sustituir al Rey y volar la cruz del Valle de los Caídos.
Un marco de tensión en el Partido Popular, la derecha democristiana, ante la iniciatova de Vox, la ultraderecha. El Partido Popular ha endurecido sus advertencias ante la división en el grupo sobre la iniciativa del partido de Santiago Abascal. La cúpula del partido no consultó a sus diputados y avisó de que no cabe el voto en conciencia. El Partido Popular eludió reunir a su grupo para discutir la moción.
La intervención de Ignacio Garriga
El diputado de Vox (la ultraderecha), Ignacio Garriga, abrió el debate en el Congreso de los Diputados de la moción de censura que su partido ha presentado contra el Gobierno defendiendo que "no es una operación de marketing, sino un deber nacional ante la inacción de otros partidos", en alusión directa al Partido Popular (la derecha) y Ciudadanos (el centro).
Habló de la "necesidad imperiosa" de la moción, que sirve para "alertar de las intenciones antidemocráticas de España" y evitar "la muerte y la ruina" que "ha traído" el Gobierno de Pedro Sánchez.
Rechazó las críticas que ha recibido la moción: que es una operación de marketing, que "refuerza la coalición socialcomunista", que "España no está para mociones de censura" o que una moción solo tiene sentido si se obtienen los votos para cambiar el Gobierno.
Garriga ha replicado que esos argumentos "no se sostienen fuera de las tertulias convenidas a determinados espacios políticos" y ha advertido de que el Gobierno no necesita una moción para reforzarse, porque "ya están los ofrecimientos de Ciudadanos para los Presupuestos o la actitud pasiva del Partido Popular".
A su juicio, PP y Ciudadanos "no se quieren dar cuenta" de que el Gobierno del "Frente Popular" comparte una agenda de la que no se va a apartar, una agenda que tiene el objetivo de "construir mayorías alternativas al orden constitucional para poner fin a la mayoría parlamentaria y al Estado de Derecho" y la "necesidad de pervertir y malear las instituciones para protegerse de sus responsabilidades criminales para poder llevar a cabo su objetivo".
Además, ha negado que la moción solo tenga sentido si obtiene los votos necesarios porque, a su juicio, eso solo es así "si lo que mueve es la adquisición de poder" y no para qué se quiere ese poder. "Puede que perdamos pero habremos transmitido los motivos que hacen necesario convocar elecciones y censurar al Gobierno", ha afirmado, añadiendo que "más perderán los diputados que mañana tengan que explicar a los españoles su responsabilidad en la continuidad de este desastre".
"Ninguna moción ha tenido tantos motivos como la presente", ha aseverado Garriga, que ha señalado que "Sánchez perpetró un fraude mintiendo a los españoles".
Por otro lado, Garriga ha acusado al Gobierno de venderse a los enemigos del país y ha aseverado que "la existencia de partidos separatistas es una anomalía democrática". Y ha citado la reforma del delito de sedición "a la carta" de los independentistas para justificar uno de los motivos de su moción.
Tras criticar a los independentistas catalanes, ha ido contra Bildu, que "ampara a ETA" y ha echado en cara al Gobierno el pacto con esa formación, recordando también el daño aún no reparado que provocó la banda terrorista. "ETA no ha sido derrotada, ha encontrado amparo en las instituciones", subrayó Garriga.
También ha querido recordar el candidato al Rey Felipe VI, del que ha destacado su importancia para España con salvas de "Viva el Rey". "Ustedes son aborrecidos por los ciudadanos mientras al Rey le aplauden", subrayó dirigiéndose al Gobierno.
Garriga también habló de la pandemia, una de las causas de esta moción, y que ha provocado la muerte de miles de españoles. "Es infame que mintiese sobre el virus chino", ha dicho el diputado, que ha vuelto a sugerir que detrás del coronavirus está Pekín, en la línea del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Citó al "falso comité de expertos, reflejo de todo lo que hace el Gobierno", la "irresponsable manifestación del 8-M" y el estado de alarma, que sirvió "para que el Gobierno diese acceso a Iglesias a la información del CNI". E insistió en la culpa de China sobre el virus, "que les ha beneficiado económicamente".
"China cerró sus fronteras internas, pero mantuvo sus vuelos internacionales. Y ahora van sin mascarillas y hacen fiestas", ha dicho Garriga, que ha concluido subrayando que, como piden ya otras naciones, "China debe pagar".
En otro orden de cosas, Garriga también ha hablado de la politización de la justicia y la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), "un motivo más para echarles".
"La Fiscalía que ustedes controlan rechaza cualquier querella que afecte a su Gobierno",dijo Garriga, que ha recordado que el Gobierno incluso "quiso controlar las redes sociales y llenó la televisión de activistas de extrema izquierda, dando dinero a todas las televisiones", a cambio de que "los medios sumisos ocultaran la realidad del virus chino y blanquearan su gestión".
La moción de censura se desarrolla de acuerdo con lo establecido en el artículo 113 de la Constitución y el 177 del Reglamento del Congreso. El primero en subir a la tribuna ha sido Garriga, quien se encarga de defender la moción, sin límite de tiempo.
Tras el diputado catalán intervino Abascal, en su papel de candidato, para exponer durante el tiempo que necesite el programa político del Gobierno que pretende formar.
Tras el discurso de Abascal, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, interrumpe la sesión y, cuando ésta se reanude, será el turno de los grupos parlamentarios, que intervendrán de orden de menor a mayor por un tiempo de treinta minutos.
Esto es, comenzará el Grupo Mixto, con Tomás Guitarte (Teruel Existe), Isidro Martínez Oblanca (Foro), José María Marzón (PRC), Carlos García Adanero (UPN), Pedro Quevedo (Nueva Canarias), Ana Oramas (Coalición Canaria), y la CUP.
El segundo grupo en intervenir es Bildu, representada por Mertxe Aizpurua, seguido del PNV (presumiblemnente Aitor Esteban), Ciudadanos (Inés Arrimadas), y los miembros del Grupo Plural: Néstor Rego (BNG), Joan Baldoví (Compromís), Íñigo Errejón (Más País) y Laura Borràs (Junts).
Posteriormente continuará Esquerra Republicana (ERC) con Gabriel Rufián (ERC); Unidas Podemos con Lucía Muñoz y Sofía Castañón por Podemos, Roser Maestro por IU y una diputada de En Comú; Vox, que tiene su propio turno de intervención: el PP, presumiblemente con Pablo Casado (PP); para cerrar con el PSOE y Adriana Lastra.
Un marco de tensión en el Partido Popular, la derecha democristiana, ante la iniciatova de Vox, la ultraderecha. El Partido Popular ha endurecido sus advertencias ante la división en el grupo sobre la iniciativa del partido de Santiago Abascal. La cúpula del partido no consultó a sus diputados y avisó de que no cabe el voto en conciencia. El Partido Popular eludió reunir a su grupo para discutir la moción.
La intervención de Ignacio Garriga
El diputado de Vox (la ultraderecha), Ignacio Garriga, abrió el debate en el Congreso de los Diputados de la moción de censura que su partido ha presentado contra el Gobierno defendiendo que "no es una operación de marketing, sino un deber nacional ante la inacción de otros partidos", en alusión directa al Partido Popular (la derecha) y Ciudadanos (el centro).
Habló de la "necesidad imperiosa" de la moción, que sirve para "alertar de las intenciones antidemocráticas de España" y evitar "la muerte y la ruina" que "ha traído" el Gobierno de Pedro Sánchez.
Rechazó las críticas que ha recibido la moción: que es una operación de marketing, que "refuerza la coalición socialcomunista", que "España no está para mociones de censura" o que una moción solo tiene sentido si se obtienen los votos para cambiar el Gobierno.
Garriga ha replicado que esos argumentos "no se sostienen fuera de las tertulias convenidas a determinados espacios políticos" y ha advertido de que el Gobierno no necesita una moción para reforzarse, porque "ya están los ofrecimientos de Ciudadanos para los Presupuestos o la actitud pasiva del Partido Popular".
A su juicio, PP y Ciudadanos "no se quieren dar cuenta" de que el Gobierno del "Frente Popular" comparte una agenda de la que no se va a apartar, una agenda que tiene el objetivo de "construir mayorías alternativas al orden constitucional para poner fin a la mayoría parlamentaria y al Estado de Derecho" y la "necesidad de pervertir y malear las instituciones para protegerse de sus responsabilidades criminales para poder llevar a cabo su objetivo".
Además, ha negado que la moción solo tenga sentido si obtiene los votos necesarios porque, a su juicio, eso solo es así "si lo que mueve es la adquisición de poder" y no para qué se quiere ese poder. "Puede que perdamos pero habremos transmitido los motivos que hacen necesario convocar elecciones y censurar al Gobierno", ha afirmado, añadiendo que "más perderán los diputados que mañana tengan que explicar a los españoles su responsabilidad en la continuidad de este desastre".
"Ninguna moción ha tenido tantos motivos como la presente", ha aseverado Garriga, que ha señalado que "Sánchez perpetró un fraude mintiendo a los españoles".
Por otro lado, Garriga ha acusado al Gobierno de venderse a los enemigos del país y ha aseverado que "la existencia de partidos separatistas es una anomalía democrática". Y ha citado la reforma del delito de sedición "a la carta" de los independentistas para justificar uno de los motivos de su moción.
Tras criticar a los independentistas catalanes, ha ido contra Bildu, que "ampara a ETA" y ha echado en cara al Gobierno el pacto con esa formación, recordando también el daño aún no reparado que provocó la banda terrorista. "ETA no ha sido derrotada, ha encontrado amparo en las instituciones", subrayó Garriga.
También ha querido recordar el candidato al Rey Felipe VI, del que ha destacado su importancia para España con salvas de "Viva el Rey". "Ustedes son aborrecidos por los ciudadanos mientras al Rey le aplauden", subrayó dirigiéndose al Gobierno.
Garriga también habló de la pandemia, una de las causas de esta moción, y que ha provocado la muerte de miles de españoles. "Es infame que mintiese sobre el virus chino", ha dicho el diputado, que ha vuelto a sugerir que detrás del coronavirus está Pekín, en la línea del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Citó al "falso comité de expertos, reflejo de todo lo que hace el Gobierno", la "irresponsable manifestación del 8-M" y el estado de alarma, que sirvió "para que el Gobierno diese acceso a Iglesias a la información del CNI". E insistió en la culpa de China sobre el virus, "que les ha beneficiado económicamente".
"China cerró sus fronteras internas, pero mantuvo sus vuelos internacionales. Y ahora van sin mascarillas y hacen fiestas", ha dicho Garriga, que ha concluido subrayando que, como piden ya otras naciones, "China debe pagar".
En otro orden de cosas, Garriga también ha hablado de la politización de la justicia y la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), "un motivo más para echarles".
"La Fiscalía que ustedes controlan rechaza cualquier querella que afecte a su Gobierno",dijo Garriga, que ha recordado que el Gobierno incluso "quiso controlar las redes sociales y llenó la televisión de activistas de extrema izquierda, dando dinero a todas las televisiones", a cambio de que "los medios sumisos ocultaran la realidad del virus chino y blanquearan su gestión".
La moción de censura se desarrolla de acuerdo con lo establecido en el artículo 113 de la Constitución y el 177 del Reglamento del Congreso. El primero en subir a la tribuna ha sido Garriga, quien se encarga de defender la moción, sin límite de tiempo.
Tras el diputado catalán intervino Abascal, en su papel de candidato, para exponer durante el tiempo que necesite el programa político del Gobierno que pretende formar.
Tras el discurso de Abascal, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, interrumpe la sesión y, cuando ésta se reanude, será el turno de los grupos parlamentarios, que intervendrán de orden de menor a mayor por un tiempo de treinta minutos.
Esto es, comenzará el Grupo Mixto, con Tomás Guitarte (Teruel Existe), Isidro Martínez Oblanca (Foro), José María Marzón (PRC), Carlos García Adanero (UPN), Pedro Quevedo (Nueva Canarias), Ana Oramas (Coalición Canaria), y la CUP.
El segundo grupo en intervenir es Bildu, representada por Mertxe Aizpurua, seguido del PNV (presumiblemnente Aitor Esteban), Ciudadanos (Inés Arrimadas), y los miembros del Grupo Plural: Néstor Rego (BNG), Joan Baldoví (Compromís), Íñigo Errejón (Más País) y Laura Borràs (Junts).
Posteriormente continuará Esquerra Republicana (ERC) con Gabriel Rufián (ERC); Unidas Podemos con Lucía Muñoz y Sofía Castañón por Podemos, Roser Maestro por IU y una diputada de En Comú; Vox, que tiene su propio turno de intervención: el PP, presumiblemente con Pablo Casado (PP); para cerrar con el PSOE y Adriana Lastra.
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