Ciudadanos decide no pactar con Pedro Sánchez ni con el PSOE

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Importante lunes 18. Reunión de la Junta Directiva del Partido Popular (PP). Emerge un nuevo Pablo Casado, atento a escuchar. Con mayor énfasis en la moderación, y con prioridad a un programa económico de reformas y un gobierno estable que recupere el crecimiento. Las encuestas, como la última de NC Report (La Razón, Atresmedia y Planeta) apuntó a un duelo apretado entre Partido Socialista Obrero Español (PSOE) (24,1% y 99-96 escaños) y Partido Popular (23,6%, 100-97 escaños). El Partido Popular lucha por tanto por ser el partido más votado y con mayor número de escaños en las elecciones generales.

En este lunes 18, relevante también la reunión del Comité Ejecutivo de Ciudadanos. Adelanto la cuestión crucial de las alianzas electorales y negociaciones después de los comicios. Fijó la posición de que en ningún caso negociará ni con Pedro Sánchez ni con el PSOE.



Por votación unánime, el Comité Ejecutivo respondió al clamor por un gobierno estable. Rechazó por lo tanto - y lo hizo por unanimidad- cualquier pacto con el PSOE y Pedro Sánchez. Las razones son obvias pero el secretario general, José Manuel Villegas, las explicó con claridad.

"El PSOE de hoy es Sánchez y Sánchez es el PSOE, no sabemos si se desligarán en el futuro", subrayó. Enfatizó además que "la mejor forma de que el PSOE se libre de Sánchez es estando en la oposición; donde vamos a intentar situarlos nosotros".

Fue muy tajante en asegurar que "ningún voto a Ciudadanos servirá para que Sánchez sea presidente del Gobierno". Indicó que las elecciones generales aparecen como un plebiscito a favor "de un Gobierno Frankenstein apoyado por populistas o separatistas" o por "abrir una nueva etapa encabezada por Albert Rivera".

Ciudadanos, en un trepidate comienzo de la precampaña, dejó expuesta la posición de un partido de centro liberal que es en la actualidad la primera fuerza en el Parlamento de Cataluña, y gobierna con el Partido Popular en Andalucia, la comunidad más poblada de España.

La posición de Ciudadanos la subrayó José Manuel Villegas. Tras las elecciones, Albert Rivera abrirá una negociación directa con el Partido Popular, la derecha. Será decisión de Vox, indicó en su conferencia de prensa, el "apoyar una nueva etapa encabezada por Ciudadanos" o si con su bloqueo hacen posible un Gobierno del PSOE de Pedro Sánchez con los independentistas.

El anuncio de Ciudadanos quiere enfatizar el escenario que se ha producido de la ruptura de Pedro Sánchez con la centralidad del PSOE. No es cierto, como afirma su líder, que el PSOE esté en una posición de centro izquiera, el espacio en que lo ancló Felipe Gonzalez.

Pedro Sánchez lo ha desplazado no sólo a la izquierda radical y anticapitalista, en su alianza con Podemos, sino también a un espacio de ruptura constitucional en su llamado Pacto Frankenstein de alianza con los partidos independentistas de Cataluña, Esquerra Republicana, y PDeCAT, y la izquierda abertzale de EH Bildu.



Precisamente el domingo 17, en interesantes declaraciones del ex vicepresidente Alfonso Guerra, quien fue número dos de Felipe González, apuntó de forma críptica a Jordi Évole la hipótesis de un PSOE sin la figura de Pedro Sánchez en lo que podría ser un final de etapa como la vivida por Mariano Rajoy. Alfonso Guerra rechazó de forma tajante cualquier diálogo, negociación o pacto con quienes se han situado fuera de la ley y la Constitución y, además, humillan y desprecian a España.