Inés Arrimadas frente a un huido y radicalizado Puigdemont próximo a la CUP
En 2015, los partidos que apoyaban el orden constitucional, la ley, la Constitución de 1978, el Estado de las Autonomías, y la unidad de España, representaban en el Parlamento de Cataluña un conjunto de 52 escaños. En el mismo escenario los partidos políticos a favor del llamado procés, la independencia de Cataluña, sumaban 72 escaños.
El proceso independentista lo lanzó Artur Mas en 2012. Carles Puigdemont -en la actualidad huido, radicalizado y próximo a la CUP, la formación antistema y anticapitalista- lo intentó culminar sin éxito. La mayoría de encuestas (especialmente GAD3 y Metroscopia) culminaron el viernes 15 sus estudios reflejando el momento del estado de ánimo de la ciudadanía catalana:
- Un 57% considera la situación económica de Cataluña como mala.
- Un 82% asegura que la situación política de Cataluña es mala.
- Y finalmente un 58% estima que no se ha informado suficiente y de forma clara a los ciudadanos catalanes de todas las consecuencias reales que para Cataluña supondría ahora la independencia de España.
Son las cuestiones centrales subrayadas por Inés Arrimadas en el acto principal de la campaña de Ciudadanos en la localidad de L´Hospitalet de Llobregat, la segunda ciudad más poblada de Cataluña, el símbolo del cambio de voto en lo que fue el bastión del PSC.
La líder de Ciudadanos, y jefa de la oposición en Cataluña, cree que llegó el momento de poner fin a los nuevos intentos de secesión de Oriol Junqueras (ERC) y Carles Puigdemont (al frente de JxCat, la nueva marca neoconvergente de PDeCAT). Ciudadanos por su parte defiende el diálogo, el pacto y el consenso, y sobre todo el orden constitucional, la ley y la lealtad.
Indudablemente, en el horizonte político, a corto y medio plazo, se debe buscar un acuerdo entre la Generalitat y el Gobierno para resolver el encaje de Cataluña en España. Un escenario muy diferente al de la ruptura con España, la Unión Europea y salida de la Zona euro.
El independentismo ha dedicado todas sus energías en los últimos cinco años a buscar y difundir argumentos para convencer a los indecisos de las ventajas de la secesión. Frente a las mentiras y la manipulación, ha sido y es Ciudadanos la fuerza que ha emergido con fuerza para rechazar este argumentario radical.
En este apretadísimo fin de campaña, Ines Arrimadas ha logrado una primera victoria moral. La mayoría de los catalanes, un 58%, estima hoy que no se ha informado claramente de las consecuencias de romper con España. Uno de cada tres votantes de Esquerra Republicana y de la CUP, y uno de cada cuatro de los de Junts per Catalunya, ya avalan esta tesis.
El proceso independentista lo lanzó Artur Mas en 2012. Carles Puigdemont -en la actualidad huido, radicalizado y próximo a la CUP, la formación antistema y anticapitalista- lo intentó culminar sin éxito. La mayoría de encuestas (especialmente GAD3 y Metroscopia) culminaron el viernes 15 sus estudios reflejando el momento del estado de ánimo de la ciudadanía catalana:
- Un 57% considera la situación económica de Cataluña como mala.
- Un 82% asegura que la situación política de Cataluña es mala.
- Y finalmente un 58% estima que no se ha informado suficiente y de forma clara a los ciudadanos catalanes de todas las consecuencias reales que para Cataluña supondría ahora la independencia de España.
Son las cuestiones centrales subrayadas por Inés Arrimadas en el acto principal de la campaña de Ciudadanos en la localidad de L´Hospitalet de Llobregat, la segunda ciudad más poblada de Cataluña, el símbolo del cambio de voto en lo que fue el bastión del PSC.
La líder de Ciudadanos, y jefa de la oposición en Cataluña, cree que llegó el momento de poner fin a los nuevos intentos de secesión de Oriol Junqueras (ERC) y Carles Puigdemont (al frente de JxCat, la nueva marca neoconvergente de PDeCAT). Ciudadanos por su parte defiende el diálogo, el pacto y el consenso, y sobre todo el orden constitucional, la ley y la lealtad.
Indudablemente, en el horizonte político, a corto y medio plazo, se debe buscar un acuerdo entre la Generalitat y el Gobierno para resolver el encaje de Cataluña en España. Un escenario muy diferente al de la ruptura con España, la Unión Europea y salida de la Zona euro.
El independentismo ha dedicado todas sus energías en los últimos cinco años a buscar y difundir argumentos para convencer a los indecisos de las ventajas de la secesión. Frente a las mentiras y la manipulación, ha sido y es Ciudadanos la fuerza que ha emergido con fuerza para rechazar este argumentario radical.
En este apretadísimo fin de campaña, Ines Arrimadas ha logrado una primera victoria moral. La mayoría de los catalanes, un 58%, estima hoy que no se ha informado claramente de las consecuencias de romper con España. Uno de cada tres votantes de Esquerra Republicana y de la CUP, y uno de cada cuatro de los de Junts per Catalunya, ya avalan esta tesis.
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