Puigdemont no volverá hasta "garantías de un juicio justo"
Carles Puigdemont afirmó que no volverá a España hasta que no tenga “garantías de un juicio justo”. A los cinco consejeros que se encontraban desde el lunes con Carles Puigdemont en Bruselas se han unido el exconsejero de Cultura, Lluís Puig, y la de Educación, Clara Ponsatí.
Carles Puigdemont y cinco de sus exconsejeros se encuentran en Bruselas desde el lunes. Trascendió que pidió asesoramiento al abogado belga Paul Bekaert, que defendió a etarras.
El expresidente anunció desde Bruselas el rechazo al uso de la violencia para construir la república catalana. "Nos hemos desplazado a Bruselas" para evidenciar el problema catalán y denunciar la politización de la justicia española". "Ni unos ni otros hemos abandonado nuestras funciones, vamos a seguir trabajando".
Criticó la "ofensiva" del Gobierno contra Cataluña. "Asumimos el viernes que el diálogo y la negociación en esas condiciones eran imposibles y acordamos priorizar la prudencia", indicó, y condenó la "represión" de PP y PSOE, "que no quieren reconocer que tienen un problema".
Respecto al "plan de trabajo" para evitar la violencia que anuncia Puigdemont, el expresidente anunció que las decisiones del Gobierno catalán desde el viernes han ido encaminadas hacia la "paz y el diálogo. No se puede construir la república desde la violencia", indicó.
"Es una demanda política y nos vamos a oponer a ella desde la política y no desde la justicia. No vamos a evitar nuestras responsabilidades pero ante las graves injusticias esta va a ser nuestra forma de acción", añadió.
Sobre las elecciones autonómicas, Puigdemont indicó que "es votando como se resuelven los problemas, esas elecciones son un reto que tomamos con todas nuestras fuerzas. Vamos a respetar los resultados de esas elecciones como siempre hemos hecho. ¿Va a hacer lo mismo el Estado español?", se preguntó.
A Europa, Puigdemont envió un mensaje: "Les pido que reaccionen, que hagan algo". Otro para el pueblo catalán: "que se prepare para un camino largo. La democracia será la base de nuestra victoria".
Carles Puigdemont y cinco de sus exconsejeros se encuentran en Bruselas desde el lunes. Trascendió que pidió asesoramiento al abogado belga Paul Bekaert, que defendió a etarras.
El expresidente anunció desde Bruselas el rechazo al uso de la violencia para construir la república catalana. "Nos hemos desplazado a Bruselas" para evidenciar el problema catalán y denunciar la politización de la justicia española". "Ni unos ni otros hemos abandonado nuestras funciones, vamos a seguir trabajando".
Criticó la "ofensiva" del Gobierno contra Cataluña. "Asumimos el viernes que el diálogo y la negociación en esas condiciones eran imposibles y acordamos priorizar la prudencia", indicó, y condenó la "represión" de PP y PSOE, "que no quieren reconocer que tienen un problema".
Respecto al "plan de trabajo" para evitar la violencia que anuncia Puigdemont, el expresidente anunció que las decisiones del Gobierno catalán desde el viernes han ido encaminadas hacia la "paz y el diálogo. No se puede construir la república desde la violencia", indicó.
"Es una demanda política y nos vamos a oponer a ella desde la política y no desde la justicia. No vamos a evitar nuestras responsabilidades pero ante las graves injusticias esta va a ser nuestra forma de acción", añadió.
Sobre las elecciones autonómicas, Puigdemont indicó que "es votando como se resuelven los problemas, esas elecciones son un reto que tomamos con todas nuestras fuerzas. Vamos a respetar los resultados de esas elecciones como siempre hemos hecho. ¿Va a hacer lo mismo el Estado español?", se preguntó.
A Europa, Puigdemont envió un mensaje: "Les pido que reaccionen, que hagan algo". Otro para el pueblo catalán: "que se prepare para un camino largo. La democracia será la base de nuestra victoria".
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