Villarejo y el marido de Cospedal, nuevos chivatazos sobre el PP

Compartir en:
fjrigjwwe9r1_articulos:cuerpo
El empresario Ignacio López del Hierro, marido de la exministra de Defensa y exsecretaria general del Partido Popular María Dolores de Cospedal, utilizó presuntamente al comisario José Manuel Villarejo para conseguir información privilegiada de investigaciones contra la corrupción que afectaban al PP. El objetivo era evitar algunas de las causas que prosperaban.

Grabaciones realizadas por el presunto cerebro de la operación Tándem difundidas por Moncloa.com revelan que López del Hierro habría actuado presuntamente como intermediario entre Génova y el comisario, y que este colaboró para torpedear las pesquisas de los casos Gürtel, Brugal y Umbra, que apuntaban de lleno a altos cargos populares.

Las conversaciones se produjeron entre junio y noviembre de 2009, es decir, en los meses siguientes al estallido del caso Gürtel (que salió a la luz en febrero de 2009) bajo el liderazgo del entonces juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón, con quien Villarejo mantenía una relación personal.

Además, en esa época, el comisario gozaba de la plena confianza del Gobierno, del Ministerio del Interior que encabezaba Alfredo Pérez Rubalcaba (2008-2011) y también de los mandos policiales del momento, como confirmó el ya audio de la comida en el restaurante Rianxo de octubre de 2009. 

Nuevos audios desvelan ahora que Villarejo habría utilizado presuntamente su acceso a esas fuentes privilegiadas y también el conocimiento derivado de su propia participación en investigaciones contra el PP para filtrar detalles clave de esos casos al marido de la entonces secretaria general de Génova.

Las grabaciones muestran a un López del Hierro interesado en conseguir la mayor cantidad posible de información del comisario y ejerciendo una supuesta función de enlace entre el ahora este y la cúpula de los populares. De sus palabras se desprende que Cospedal estaba al tanto de esas gestiones.

Una de las primeras conversaciones registradas por Villarejo se habría producido en el verano de 2009. El comisario y López del Hierro intercambian opiniones sobre el nulo efecto que Gürtel estaba teniendo, a su juicio, en el respaldo que cosechaba el PP en Madrid y en la Comunidad Valenciana, las dos regiones más afectadas por la trama.

El empresario asegura que es el momento de que Esperanza Aguirre y Francisco Camps adelanten elecciones. “En Valencia ganan por 20 puntos. Ahora mismo. 'Mira, anda, sigue con la corrupción en Valencia. Mira para lo que te sirve, ¿eh?'”, asegura López del Hierro

En concreto, el comisario afirma: “Ahí, has visto, que se ha conseguido parar, como te dije: 'Vamos a ver si conseguimos parar hasta septiembre lo de los pagos esos en B'. Que estamos ahí parados, macho, pero parados. Te acuerdas que… el calendario, afortunadamente, (...) mucho caso, que era conseguir cerrar el tema de Camps y si sale lo de la financiación ilegal, pues que se coma el marrón alguno de ellos”.

En otra de conversación grabada se escucha a Villarejo contarle a López del Hierro que ha avisado al PP de Valencia para que destruya material comprometedor. El comisario explica que trasladó el mensaje a Juan Cotino, que entonces era vicepresidente tercero y consejero del Gobierno de Camps

“Entonces, le dije, digo [a Juan Cotino]: 'Estamos intentando lo posible y tal… pero dile a tu sobrino [Vicente Cotino] que limpie… que hay un registro… que limpie todos los papeles… Que no sabe nada. Que lo tenga eso… Y que vamos a procurar… Pero, en la medida de lo posible, que tengáis resuelto el tema de la explicación. Coño, como es mi sobrino y yo soy un elemento fundamental aquí en la Junta, lo que quieren ya es quemarme para que no vuelva a abrir el pico. Como soy el que protesta…'. Le digo: 'Tenedlo eso preparado, tal, y cómo además vamos a procurar que no se encuentren datos interesantes, tal. Por lo tanto…'. 'No, no te preocupes'. Eso lo hablé con él hace 10 días”, asegura Villarejo.